el pelo y la lengua

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viernes, 15 de abril de 2011

VENDETTA

La concepción actual de sociedad es una perversión, una visión corrupta de lo que realmente significan las personas. Hoy en día nadie confía en nadie, somos todos rivales como en un gran ring peleando por nuestros intereses. Estamos divididos por el propio sistema que nos obliga a luchar entre nosotros, pero no tiene por qué ser así. Si todos permaneciésemos unidos por unos mismos ideales no habría necesidad de competir, y lo que es más importante, nuestro poder sería mayor que cualquier otro, y aquellos que nos dividían, sucumbirán.
Si nos unimos podremos afrontar cualquier problema que se nos presente pero debemos hacerlo cuanto antes, porque cada día que pasa sin asumir nuestra responsabilidad la guerra y la pobreza continúan expandiéndose.
Es nuestro deber como ciudadanos del mundo, como parte de la humanidad defender nuestros ideales; es la hora de dejar de correr de un lado a otro y pararnos a reflexionar. De poner sobre la mesa los problemas y plantear soluciones reales, accesibles y eficaces.
Algunos, simplistas y obsesivos, pensarán que defiendo el comunismo, pero no es cierto, yo defiendo la bondad de las personas, intento mostrar la grandeza del concepto de humanidad.
Hasta ahora nos han hecho creer que el hombre por naturaleza es egoísta y ambicioso, destruyendo nuestra esperanza y asegurándose de nuestra sumisión.
Hasta ahora nos hemos creído sus mentiras, pero ya nunca más, porque no vamos a permitir que nos arrebaten la libertad, porque juntos habrá esperanza y vivirá la humanidad.
Juan Tomás Trabuchelli 2º Bachillerato Colegio Internacional Altair

1 comentario:

Lucía dijo...

Me gusta, me gusta, y estoy bastante de acuerdo, aunque veo un pequeño problema con eso de encontrar una ideología común a todos... Como mucho buscaría una serie de principios muy básicos, jeje.